Posted on 28 abril 2014
Tags: @jjaldogomez, Dios, floklore religioso, oración, procesiones, religiosidad popular, semana santa
@jjaldogomez: Las primeras líneas de este breve artículo no pueden ser sino para desear una feliz Pascua de Resurrección a todos los lectores y amigos de Al tercer día. Dios vuelve a resucitar, como cada año, como cada día, como cada momento… Nos da la oportunidad de recomenzar, de encontrarnos con Él. Aprovechémoslo… Dios se muestra en cada realidad de la vida, sólo hay que tener el oído del alma presto y dispuesto para escuchar como nos llama, como nos alienta, como nos sostiene, como nos espera, como nos transporta… Como nos AMA.
Dios está siempre ahí. Incluso en la religiosidad popular, por eso, me gustaría hacer unas matizaciones al artículo que hace unos días publicaba @bearubis en este mismo foro. Sin ánimo de entrar en absurdas polémicas, que no tienen sentido, y compartiendo muchos de los aspectos que comenta Bea, por ejemplo el hecho de que la Semana Santa, como otros muchos instantes de las fechas religiosas del calendario, tienen que ser días para vivirlos desde la espiritualidad y la reflexión, no podemos sin embargo rechazar otra forma más del sentimiento religioso, como son las muestras de la religiosidad popular. La procesiones de Semana Santa, como cualquier otra en otro momento, son también oraciones. No lo olvidemos. Nacen desde lo más íntimo del sentimiento de la persona, de su amor a Dios, y merecen siempre respeto. Es demagogia pretender enlazar la meteorología con los deseos de Dios o con lo que realmente quiere. No podemos caer en ese tipo de consideraciones para intentar aliar a Dios con nuestra forma de entender la fe. Sería un grave error.
La fe es algo personal, como lo es el encuentro con Dios. Ni el nuestro es el correcto ni deja de no serlo. Es sólo eso, el nuestro. Cada persona es un mundo. Entrar en valorar la forma de encontrarse con Dios es demasiado presuntuoso. Hay que respetar como se acerca cada cristiano a Dios y, a ser posible, compartir ese encuentro. Que hay cosas que pueden mejorarse en las muestras de la religiosidad popular es totalmente cierto, que muchas veces se tornan en sólo folklore, también lo es, pero eso ya depende de cada individuo y no olvidemos que Dios nos hizo libres. Libres para acertar, libres para equivocarnos, y libres para seguirlo. Todos los caminos conducen a Roma, y no son pocos los caminos que llevan a Dios. El de la religiosidad popular es uno de tantos. Respetémoslo.
Posted on 16 abril 2014
Tags: @bearubis, Cófrade, cofradías, devoción, folklore, hermandades, iPasión, procesión, Resurrección, semana santa
«Afirman conocer a Dios y lo niegan con las acciones;» Ti 1, 16a
@bearubis: ¿Devoción por la Semana Santa o por el folklore que se crea en ella? ¿Procesión de fe o desfile de lujos? ¿Vivirla como un cristiano o solo como cofrade?
Que la Semana Santa se ha espectacularizado, es un hecho. Ya no solo mueve pasiones, sino turistas. Es un acontecimiento que nos hace sentir orgullosos de nuestra ciudad. Es fácil escuchar a gente hablar sobre la Semana Santa como una semana de ilusión, nervios, respeto, devoción, esperanza… Sin embargo, durante esta semana, existe la misma facilidad para encontrar en las calles a aquellos que no duermen por ver una procesión, como a los que son incapaces de “madrugar” para ir un domingo a misa, ya que tristemente, son dos perfiles que se han hecho compatibles en muchas personas. Gente que venera una imagen y la cubre de lujos, pero que nunca ha dado una limosna a alguien que de verdad lo ha necesitado. Aquellos que rezan e imploran a Dios que la lluvia les dé tregua para poder lucir sus imágenes en procesión, pero que desconocen la existencia de la Vigilia de Resurrección en la que se celebra el acto más importante para la vida de un cristiano.
Esto no pretende ser un juicio, sino un llamamiento a vivir la Semana Santa desde la cristiandad. La Semana Santa se define como la conmemoración anual cristiana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazaret. Esta celebración es de suma importancia para cualquier cristiano, ya que es cuando se recuerdan los acontecimientos principales en los que se basa su fe. Una Fe que, principalmente, cree en Dios y en la resurrección de Cristo; ¡No celebremos la muerte, sino la resurrección! Celebremos que Jesús venció a la muerte y abrió el camino hacia la vida eterna.
Así, los que realmente se involucran en la Semana Santa, aquellos que viven día a día las Cofradías y Hermandades, deben de tener en cuenta que la Semana Santa no son procesiones, ni todo el trabajo que hay detrás de ellas, sino una forma de vivir la Fe en Cristo durante todo el año y más especialmente durante esta Semana.
Con tanta lluvia durante la Semana Santa de los últimos años, quizá deberíamos empezar a plantearnos si Dios nos pide que dejemos de hacer de la muerte de su hijo mero espectáculo y folklore.