@fdxhh: El juego de Ender, la esperada película basada en la novela homónima escrita por Orson Scott Card en 1985, llegó a los cines españoles el pasado 8 de noviembre. Para todo aquel que no lo conozca,»El juego de Ender» es una afamada novela ganadora de los premios Nebula (1985) y Hugo (1986). Trata sobre la búsqueda y entrenamiento de niños, sobretodo de uno en concreto, para convertirlos en genios militares y poder derrotar así a los insectores, una especie alienígena que intentó destruir la tierra.
Como es natural, cuando una de las obras mas famosas de la literatura de ciencia ficción del siglo pasado aterriza en la gran pantalla, los efectos especiales, las explosiones y demás parafernalia son utilizados al máximo para intentar atraer la atención del gran público; y como la formula funciona, lo han conseguido una vez más. Y aunque es pronto para hablar de cifras, »El juego de Ender» ya se ha situado a la cabeza en la taquilla de Estados Unidos y también de nuestro país.
Pero la pregunta es la de siempre. ¿Hace justicia la película a la obra?
Como gran fan de la saga de Ender ( catorce libros, aunque algunos sin publicar hasta la fecha) me veo en la obligación de decir que no, definitivamente no. Siempre sucede, el lector siente que demasiadas cosas se quedan en el tintero cuando ve un film de uno de sus libros favoritos; falta de escenas esenciales, cambios trascendentales en los personajes o ligeras diferencias argumentales.
Cierto es que debe ser muy complicado compilar unas 350 páginas en dos horas, y al fin y al cabo, no se debe esperar que una película basada en un libro siga a rajatabla el guión de este, pero quizás el mayor fallo, intentando no hacer ningún spoiler, es el final de la película, demasiado repentino.
Lo que se supone que es una decisión extremadamente delicada, lo solucionan con una rabieta sin apenas explicación; lo que descoloca a aquel que no haya leído el libro y entienda las razones de esta. Demasiada guerra y vuelo intergaláctico para no mostrar la verdadera base del libro, que es la naturaleza del personaje. Parece otro producto de la cultura actual, donde es más importante el continente que las personas. En el cine de Hollywood, los efectos especiales que los personajes.
En definitiva, un gran libro que merece la pena leer tanto por el desarrollo de la trama como por la profundidad de los protagonistas y que podéis conseguir en casi cualquier librería por unos siete u ocho euros (en edición de bolsillo, claro), y una película que apenas llega a ser un resumen del primero, que entretiene y, todo sea dicho, con una puesta en escena realmente espectacular.
